De regreso a Cuetzalan, subido en la camioneta al dar la vuelta esta niña salió de una casa... me encantó su mirada, su vestido, su posee, ya había guardado la cámara pero no podía perderme esta imagen, por fortuna no se movió mientras pude sacar la cámara de nuevo, así con una gran sonrisa la vi y me regaló esta figura.